Matriz del ciclo vital de la empresa

Esta matriz tiene como propósito ayudar a identificar:

  1. La fase en que se encuentra la empresa en su ciclo vital.
  2. Cuáles son las amenazas o problemas que se puede esperar según la fase en que se encuentre.

Entre estos últimos, es importante diferenciar en cada fase entre:

  • Problemas normales, que son propios de la evolución de la empresa, que son de más fácil solución.
  • Problemas patológicos que, pueden, incluso, provocar la desaparición de la organización.

De esta forma, en la empresa serán conscientes de esas amenazas y problemas y podrán prepararse mejor para su corrección o (a veces) evitar que se presenten.

Nótese que no todas las empresas siguen un comportamiento lineal por etapas; algunas se “saltan” fases y, por ejemplo, del “Crecimiento” pasan directamente a la fase de “Aristocracia” o, incluso, a la de “Burocracia”. En el fondo, no se trata de un problema de “envejecimiento paulatino y progreso” de las empresas, si no de las actitudes y comportamientos que asumen sus mandos de mayor responsabilidad.

MATRIZ DEL CICLO VITAL DE LA EMPRESA

FASE

CARACTERÍSTICAS CLAVE

PROBLEMAS Y AMENAZAS NATURALES

PROBLEMAS Y AMENAZAS PATOLÓGICOS

1

GESTACIÓN

– La empresa aún no existe.

– La visión está centrada en el futuro.

– Liderazgo demasiado optimista.

– Falta de una dirección clara.

– Improvisación sobre la marcha.

– Exceso de presión antes del inicio: es posible que el proyecto llegue al momento de su nacimiento con los recursos agotados.

2

INICIO

-Todo es acción.

-Todos están en la calle.

– Pocos sistemas.

– Dirección muy fluida.

– No hay tiempo para pensar.

– No existen políticas claras.

– Poca planificación.

– Inconsistencia.

– Fuerza impulsora: la creatividad.

– Excesivas presiones a corto plazo.

– Se pierden oportunidades a largo plazo.

– Exceso de demanda.

– No se controla el efectivo.

– La empresa puede “morir de éxito excesivo”.

– La falta de capital de trabajo ahoga la empresa.

– Riesgo de mortalidad infantil.

3

DESARROLLO

– La empresa sobrevive y crece.

– Todas son “oportunidades” (no se ven las “amenazas”).

– Se trabaja por intuición.

– Contrata hoy lo que necesitaba ayer.

– Las ventas crecen, pero no así la rentabilidad.

– No establecen prioridades.

– Fuerza impulsora: el liderazgo personal del emprendedor.

– Falta de liquidez o de crédito.

– Exceso de optimismo.

– Organización centrada en la persona del emprendedor.

– No existe un plan para lograr el crecimiento sistemático.

– Estructura en torno a personas, no a funciones.

– Crecimiento del personal poco controlado.

– Lucha interna: síndrome “ellos-nosotros”.

– A pesar de la creciente complejidad de la gestión, el emprendedor se resiste a delegar.

– Alto nivel de conflicto entre los mandos “viejos” y los “nuevos”.

– Permanecer demasiado tiempo en esta fase: la empresa puede morir debido al crecimiento desorganizado.

4

CRECIMIENTO

– La gestión cambia y se orienta más a resultados.

– Se establecen políticas y sistemas.

– Se elaboran planes y se ejecutan.

– Se comienza a pensar en términos del medio y largo plazo.

– Se comienza a diversificar el portafolio.

– La rentabilidad se consolida.

– Fuerza impulsora: la delegación.

– Se introducen cambios que limitan la vitalidad de la organización.

– Peligro de burocracia incipiente.

– Exceso de confianza y optimismo.

– Los cambios en la estructura no responden a las necesidades impuestas por el crecimiento.

– Desviar los recursos generados por el crecimiento.

– No controlar orgánicamente el crecimiento (la empresa se le va de las manos a sus mandos).

– Falta de recursos para soportar el crecimiento.

5

MADUREZ

– La organización se consolida.

– Se crean estructuras más sólidas.

– La gestión se profesionaliza.

– La empresa crece por inercia y porque es arrastrada por el mercado.

– Fuerza impulsora: la coordinación.

– Exceso de confianza.

– Peligro de convertirse en una organización conservadora.

– Menos aspiraciones de desarrollo.

-No se estimula la creatividad.

– Los niveles de mando dedican todo su tiempo a “administrar” a empresa, pero no se ocupan de hacerla crecer.

– Se premia a los que obedecen.

-Temor a asumir nuevos riesgos.

– Parálisis por envejecimiento: se conforma con lo que se obtiene en lugar de conseguir lo que se quiere.

– Pérdida de contacto con el mercado.

– Vivir en el pasado (lo mucho que hicimos, no lo mucho que queda por hacer).

6

ARISTOCRACIA

– Formalismos consolidados: relaciones, reuniones, compromisos.

– La tónica general es “no hacer ruidos”.

– Se invierten recursos en instalaciones superlujosas.

– El clima se sustenta en “quietud” y “aislamiento”.

– Mucha liquidez ociosa.

– Poca innovación interna.

– Tendencia al inmovilismo.

– Narcisismo organizativo (somos lo mejor de lo mejor).

– Se descuida el análisis de los problemas y errores.

– Elevar los precios para mantener la rentabilidad.

– Comprar otras empresas para mostrar una apariencia de crecimiento.

7

BUROCRACIA

– La empresa se preocupa más por “cómo” se hacen las cosas y no por los resultados que se obtienen.

– Para quienes trabajan en ella lo importante es alcanzar el poder (las relaciones internas se “politizan”).

– Los mandos comienzan a buscar las causas de los problemas que usualmente se atribuyen a una persona (no a los sistemas).

– Comienza la “cacería de brujas” interna.

– Demasiados conflictos y ataques personales.

– Demasiadas normas que se convierten en “rituales”.

– Los empleados y mandos se organizan por grupos enfrentados.

– Los empleados caen en estado paranoico.

– Aislamiento del mercado y del entorno (la empresa desconoce cuáles son sus objetivos).

– La energía se concentra en las luchas internas, no contra la competencia.

– Pérdida progresiva de participación de mercado.

– Alto riesgo de quiebra o de ser comprada.

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